Aunque los seguros de hogar no son obligatorios es muy recomendable su contratación, y entre las coberturas que se debe suscribir está la de responsabilidad civil que garantiza, frente a los vecinos una convivencia pacífica y al asegurado una tranquilidad y ahorro económico, pues vivir en comunidad –dentro de un edificio de vecinos- y no contar con seguro de hogar que cubra la responsabilidad civil no parece muy buena idea y seguro que es la opción más costosa económicamente, ya que habrá que hacer frente con su dinero a los daños que de manera accidental se pueda causar a cualquier vecino.
Situaciones tan frecuentes como los daños por agua como consecuencia de una rotura de tubería privativa o la caída accidental de un tiesto a la calle, son ejemplos de los siniestros en los que resulta de gran utilidad esta cobertura. En estos casos, la cobertura de responsabilidad civil del seguro de hogar ofrece al asegurado y a su familia la tranquilidad de saber que la póliza hará frente al pago de daños a terceros de los que son responsables. La garantía de responsabilidad civil cubre tanto los daños materiales como los personales, y aunque ambos pueden generar elevados gastos, en el caso de los últimos las indemnizaciones pueden ser cuantiosas, por lo que contar con un seguro de este tipo puede ayudarte. Además, estos seguros pueden llegar a cubrir los gastos de tu defensa en el caso de que se produzca un juicio, además de los gastos de las reclamaciones.
La responsabilidad civil es la que tiene cualquier persona cuando por acción u omisión causa un daño a otro, interviniendo culpa o negligencia, por lo que está obligado a reparar el daño causado. Vista su definición, y en relación con los seguros de hogar, una cobertura de responsabilidad civil incluida en una póliza se presenta como la mejor respuesta a cualquier eventualidad que se de en la vivienda o fuera de ella y afecte a otras casas o personas. Es importante fijarse bien, en el momento de la contratación, del alcance de esta cobertura pues no todas las aseguradoras ofrecen las mismas condiciones y hay que sopesar si se asegura sólo el continente o, también, el contenido.
En responsabilidad civil en el continente la garantía cubre los daños provocados por agua de la instalación de nuestra casa y que afecten a viviendas vecinas, ya sea por fugas de agua, rotura de tuberías o pequeñas inundaciones. También se incluyen en esta cobertura aquellos daños, personales o en el patrimonio, que sean producidos por cualquier elemento de la casa asegurada en un tercero, como por ejemplo la caída de una teja.
En los referente a la responsabilidad civil sobre el contenido esta garantía se hace cargo de los daños que podamos ocasionar a terceros, tanto dentro como fuera de la vivienda asegurada. Existe la posibilidad de cubrir nuestra responsabilidad por los daños que puedan producir los empleados de la casa o, incluso, las mascotas de la familia que no tengan la obligación de contar con un seguro obligatorio. La garantía de responsabilidad civil también puede cubrir al asegurado en el desempeño de actividades no profesionales y deportivas.
Existen más coberturas, dependiendo lógicamente de la aseguradora y contrato firmado, por lo que para cubrir las necesidades que realmente tengamos en el momento de la contratación y tras la ocurrencia de un siniestro siempre deberemos estar bien asesorados por un mediador que nos señalará las coberturas necesarias para sus intereses y le ayudará en caso de siniestro informándole de si el daño producido tiene cobertura en su seguro.
Federico Martínez de la Puente. Abogado Seguros CEA