El importe que pagamos por nuestro seguro, es decir la prima, está fijado por cada compañía de acuerdo con sus criterios actuariales y estadísticos, siendo proporcional, entre otros aspectos, a su duración y a su mayor o menor probabilidad del siniestro y su coste.
Habitualmente la prima se calcula de forma anual, pero hay aseguradoras que admiten que este pago se fraccione, permitiendo una mayor comodidad de pago al asegurado que de esta forma no tiene que hacer frente a un solo desembolso que puede suponer hacer un seguro adecuado a sus necesidades. No obstante, las aseguradoras cuando se opta por este sistema de pago suelen incluir un recargo por lo que siempre es interesante conocer su montante para evitar un sobrecoste en el importe del seguro.
Pero sobre este punto hay que advertir sobre el carácter anual de la prima, es decir, la prima, a pesar del fraccionamiento, es indivisible, ya que el asegurador soporta el riesgo total en cada instante de duración del contrato y no por fracciones de tiempo. La prima corresponde a la compañía de seguros por entero durante todo el tiempo convenido como duración del contrato, aunque el pago se realice de forma fraccionada. Es decir, por ejemplo, en una póliza con pago trimestral, si se ha producido una pérdida total en el primer trimestre, la aseguradora está facultada legalmente para requerir el abono de las cuotas restantes hasta la finalización del año contratado.
Como vemos el fraccionamiento de pago en los seguros de los coches es una ventaja que ayuda a muchos conductores a poder suscribir la póliza más interesante para ellos y para sus vehículos, pero debemos tener en cuenta, que en caso de siniestro la prima tiene carácter anual.
Federico Martínez de la Puente. Abogado Seguros CEA