La vuelta a la normalidad tras el parón provocado por el coronavirus ha hecho que muchos conductores cojan el coche de nuevo tras meses sin tocarlo y la mayoría ha perdido el habito de conducir. Cualquier conductor se siente un poco extraño y torpe la primera vez que conduce después de haber pasado meses sin hacerlo.
No se calculan con la misma rapidez y precisión las velocidades y las distancias, con otros coches y elementos de la vía. Tampoco se circula con la misma soltura entre el tráfico, ni se sienten como antes las reacciones del coche. Y también se pierde algo de destreza con el volante, los pedales y otros mandos del automóvil.
Pero está vuelta a la normalidad se ha visto empañada con un aumento de la siniestralidad causada en la mayoría de los casos por un exceso de velocidad, después de tres meses en los que la movilidad se ha reducido para evitar la propagación del coronavirus, la DGT apela a que las ganas de salir a visitar a familiares y amigos, y de vivir no se traduzca este verano en una mayor velocidad al volante. "Los límites de velocidad no son arbitrarios y están establecidos en función de las características de la vía", afirma. Un viaje largo por carretera es una actividad que produce un gran cansancio psicológico, sensorial y físico. Y ahora más que nunca al volver a conducir, porque nos hemos desacostumbrado a conducir en distancias largas. No hay que emplear referencias de viajes anteriores, del tiempo que se tardó en llegar al destino o de las paradas que se efectuaron. En este primer viaje es muy recomendable parar más a descansar y no tener una hora de llegada marcada.
Pero no solo hay que tomar las debidas precauciones en la conducción, sino que también habrá que revisar el coche ya que un coche y sus componentes pueden deteriorarse a mayor ritmo y de forma más acusada durante un largo periodo de inactividad como el que ha sido el confinamiento. Una vez que hayamos revisado el vehículo y comprobado todos los elementos nos podemos encontrar que el mismo no funciona o funciona incorrectamente por lo que debemos procurarnos un medio para solventar el problema como puede ser el seguro del coche que a través de su cobertura de asistencia al vehículo nos va a ayudar en esa situación. Actualmente la mayoría de las aseguradoras ya ofrecen esta cobertura desde el Km. 0, es decir desde el domicilio del asegurado y con un ámbito geográfico de los países de la Unión Europea y ribereños del Mediterráneo.
Federico Martínez de la Puente. Abogado Seguros CEA