Hoy en día abrir un negocio es el sueño de mucho emprendedor y requiere de una gran inversión, por ello que no solo hay que estudiar el tipo de negocio, sino también en donde aperturarlo y de que inversión disponemos.
Una vez que lo abras, no dejes que un simple accidente eche por tierra todos tus sueños, por eso que se recomienda que se haga un seguro de comercio que cubra tanto la responsabilidad civil como los bienes o existencias que tengas.
Las coberturas de un seguro de comercio u oficina han de ser útiles para nuestra actividad concreta, y buscar precios competitivos porque existe mucha diferencia entre unas opciones u otras.
La especialización que requiere este tipo de seguros hace desaconsejable la contratación de este tipo de seguro con nuestro banco o caja, ya que una vez más nos pueden ocasionar problemas de calidad por ejemplo en la atención de un siniestro. Hay que resaltar que si desarrollamos una actividad en un local que no es de nuestra propiedad no debemos asegurar el 100% del continente, ya que ese gasto corresponderá al propietario; nosotros debemos asegurar en continente sólo los gastos de reforma que hayamos tenido, o una pequeña cantidad para dejar cubiertos los desperfectos en caso de robo.
Para una mejor idea de una póliza de comercio hay que estimar como coberturas básicas para su contratación las siguientes:
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Asistencia en el comercio con atención 24 horas y servicio permanente de reparaciones.
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Indemnización diaria en caso de paralización de actividad, a consecuencia de un siniestro amparado por las coberturas de daños materiales y robo.
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Daños eléctricos, cubriendo los daños a las instalaciones y a los aparatos eléctricos conectados a las mismas.
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Actos vandálicos.
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Daños por agua.
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Daños materiales y robo, cubriendo la sustitución de llaves y cerraduras en caso de robo o extravío y robo de dinero en efectivo.
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Incendio, incluyendo daños por humo y explosión.
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Fenómenos atmosféricos, incluyendo daños por caída de rayo y pedrisco.
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Roturas de lunas, escaparates, rótulos ...
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Pérdida de alquiler o desalojo forzoso, para el caso de que el local no pueda utilizarse por un siniestro cubierto en póliza.
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Defensa jurídica y reclamación .
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Responsabilidad civil, tanto la de explotación como la patronal y cualquiera que cubra la actividad del comercio.
La complejidad de este tipo de seguros, y sobre todo la importancia de la protección que supone el seguro para dar tranquilidad en caso de siniestro hacen muy recomendable una correcta información previa de las coberturas necesarias y un asesoramiento profesional en caso de siniestro.
Federico Martínez de la Puente. Abogado Seguros CEA
