Ante un siniestro, el asegurado siempre ha de facilitar todas las informaciones relativas a las circunstancias del siniestro, presentando su declaración ante su mediador, que gestionará el mismo con la aseguradora. Una vez presentada la declaración la figura del perito es muy importante para valorar los daños realizando la tasación que resulta imprescindible para establecer la existencia del siniestro y su valoración.